Hay que tener en cuenta la idiosincrasia de los países que quedan fuera de la zona euro: En
países como Indonesia, la máxima autoridad registral es el Notario, quien certifica que el
terreno está libre de cargas y dispone de todas las licencias preceptivas para construir cada
tipo de edificación, teniendo nuestros terrenos la licencia notarial rosa/roja que permite la
construcción en los términos que contempla el Proyecto de referencia.
El estatus legal del terreno se denomina Leasehold consistente en un contrato de
arrendamiento pero con la diferencia de éste, en que se dispone del 100% de la propiedad
durante el plazo de vigencia del contrato, así, el propietario originario del terreno no puede
vender, traspasar el contrato, modificar el contrato, etc., durante el periodo de tiempo que
dure el contrato de Leasehold. Los contratos de Leasehold se negocian en periodos desde 40
años hasta 80 años, pudiendo volver a renovarse el contrato de Leasehold por 80 años más, y
así sucesivamente.
Una vez terminadas las viviendas, el contrato de Leasehold se cede de forma individual a cada
uno de los compradores, siendo cada comprador propietario de las villas en las que ha
invertido y del porcentaje del terreno que le corresponda del Resort según reparto. Junto al
terreno, los compradores son copropietarios de los servicios del Resort (piscina, restaurante,
gimnasio, sala de yoga, etc.).
Efectivamente hay restricciones para inversores extranjeros a nivel particular, por eso, el único
vehículo para la inversión es mediante una sociedad (en este caso de capital 100% extranjero,
denominada sociedad PT PMA) que desarrolle el Proyecto.

Las propiedades serán gestionadas por la misma mercantil que las ejecute, la sociedad PLATA

INTERNATIONAL PT PMA (de capital 100% extranjero).